Mucha gente piensa que las inversiones y los negocios están destinadas a unos pocos. A gente con mucho dinero, y en una escala fuera del alcance de los mortales. Pero esto no es así, ¡con la asesoría correcta todos podemos invertir!

Hoy, queremos hablar de una forma de inversión que se hace cada vez más común, por sus beneficios asociados: comprar propiedades. ¡Aquí te explicamos por qué es tan buena decisión!

1. Lo primero es lo primero: es una inversión segura.

Comprar un departamentos (o varios) es una inversión. El valor del dinero fluctúa, pero las propiedades siempre serán un valor seguro y en alza, que llegado el minuto podrías arrendar o vender

2. Es una inversión que puede “pagarse por si sola”.

¡Suena como un sueño hecho realidad! Al acceder a un crédito para comprar una propiedad, puedes arrendarla e ir pagando esas cuotas con la plata que obtienes del negocio. Finalmente, es un proyecto súper beneficioso a largo plazo.

3. Te otorga estabilidad y seguridad.

El dinero, los trabajos… ¡Todo va y viene! Pero tu propiedad siempre estará ahí. Ser dueño de uno (o varios) departamentos entrega mucha seguridad, tanto financiera como emocional.

4. Puedes acceder a ciertos beneficios fiscales.

Poseer una o varias viviendas es perfecto para obtener beneficios fiscales que te harán la vida un poco más fácil.

5. ¡E incrementar tu jubilación!

¿Sabías que puedes incrementar tu jubilación invirtiendo en propiedades? Una de las estrategias de inversión más efectivas es complementar tu futura pensión con propiedades, puesto que la compra de departamentos para poner en renta ayuda a los ingresos mensuales.

6. Y es que, finalmente, es una forma de asegurar tu futuro

¡Muy pocos bienes tangibles otorgan esa estabilidad! En caso de aprietos, puedes arrendarla, venderla o vivir ahí abaratando costos.

¿Y tú? ¿A qué esperas? Mientras antes empieces, ¡mejor!